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Afrontando la limpieza de oficinas y despachos
Muchos clientes nos solicitan la limpieza de sus oficinas. Allí nos encontramos despachos con diferentes particularidades; y es de gran importancia conocer el material de esas superficies para elegir el sistema de limpieza más idóneo.
Existen diferentes tipos de limpieza de superficies, cuyo objetivo es el mantenimiento y conservación de las mismas. Dependiendo del tipo de superficie, y de su estado, llevaremos a cabo unos métodos u otros. Del mismo modo, pautaremos el hacerlo con una frecuencia u otra.
Sin embargo, los trabajos de limpieza más frecuentes son aquellos que hemos de realizar diariamente. En esta entrada, queremos contarte algunas de las técnicas más habituales y que pueden serte de ayuda en tu día a día.
Limpiar el Mobiliario
Eliminar el polvo y la suciedad es muy importante. Entre otras razones:
- El polvo depositado sobre una superficie da sensación de suciedad
- El polvo es transmisor de microorganismos
- Algunas personas sufren de alergia
- El polvo siempre dificulta el buen funcionamiento de máquinas y equipos de precisión
Por tanto, limpiar las superficies del mobiliario es mucho más importante de lo que pueda parecer. No sólo por estética. Sino también, por razones de salud.
¿Cómo eliminar el polvo del moviliario?
En este caso, utilizaremos plumeros, aspiradores, bayetas y gamuzas tratadas con productos limpiadores. Lo idóneo es buscar una fórmula basada en la mayor eficacia y el menor esfuerzo.
Entrando en detalle, en una oficina o despacho, podemos identificar diferentes tipos de mobiliario:
Muebles tapizados: Son más complejos de limpiar por estar recubiertos de textil, piel o piel sintética. Es muy frecuente que absorban la suciedad, dificultado el obtener buenos resultados. Trabajo idóneo: Aspirar diáriamente para conseguir con la constancia que el polvo no penetre. Con cierta periodicidad, aplicar un champú específico para textiles, sin mojar en exceso.
Mesas, estanterías, armarios de metal, armarios sintéticos: El 95 % de este tipo de mobiliario que encontramos en las oficinas de nuestros clientes están hechos mayoritariamente de melamina. Trabajo idóneo: Usar agua y jabón. Así de simple. Con una bayeta de microfibra tendrás resultados excelentes.
Otros mobiliarios de madera maciza: En este caso hablamos de limpiar muebles de madera natural, barnizada o no, y lo mejor es seguir las indicaciones de ebanistas y carpinteros. Trabajo idóneo: Una bayeta humedecida con una solución de jabón neutro; siempre pensando en que la madera esté perfectamente cuidada y nutrida, y no requiera de trabajos de mantenimiento adicionales.
Equipos microinformáticos y electrónica en general: En este grupo incluimos todo lo electrónico: Monitores, ordenadores, teléfonos, impresoras, fotocopiadoras… Requieren de una desinfección profunda a la vez que cuidadosa. Trabajo idóneo: Limpiar las carcasas exteriores muy levemente humedecido, con spray específico para electrónica, preferentemente con el dispositivo apagado.
Conclusiones
Esta es nuestra propuesta general para ayudarte a entender los pormenores que tiene la limpieza de una oficina o despacho. Como puedes ver, no hemos entrado ni en la diversidad del pavimento, ni en las limpiezas internas periódicas que habría que hacer en los equipos electrónicos, ni en la limpieza de los contenedores documentales. De todo esto, ya hablaremos en otras entradas.
Lo importante que queremos hacerte ver es que, al ser una limpieza muy meticulosa, es imprescindible saber lo que se hace en cada momento, y hacerlo bien. Y, en Limpiezas Marta, lo sabemo de sobra: Por algo somos la empresa de limpieza que crece de manera más sostenida en Toledo y alrededores.